Colo Colo se vuelve a escapar en la cima del Clausura luego de una jornada que combinó resultados redondos para los de Macul. Con el triunfo de la U en el Clásico Universitario, el Cacique quedó con una inmejorable oportunidad de dispararse en el liderato, pero tenía que hacer lo suyo y no falló, pues venció 2-0 a O’Higgins en el Monumental y dio un gran paso hacia la obtención del título.
El elenco de Pedrero entraba a la cancha sabiendo que su “archirrival”, la Universidad de Chile, le había dado una mano al vencer a Universidad Católica, pero asumiendo que toda ayuda externa debe ser acompañada de la labor propia, de lo contrario de nada sirve.
Y esa presión que significaba hacer su tarea se la pudo sacar de inmediato el Cacique, ya que al minuto de juego José Pedro Fuenzalida aprovechó una mala salida de O’Higgins para enviarle un ajustado centro a Felipe Flores, quien contó con suerte para definir, pues no le dio de lleno al balón, pero aún así le bastó para vencer la resistencia de Paulo Garcés.
El gol significó además revivir los fantasmas de los errores defensivos en el cuadro celeste, que cierra una semana marcada por los yerros en la zona posterior.
Pero a pesar de aquello, los dirigidos de Eduardo Berizzo lograron afirmar sus líneas, impidiendo que Colo Colo generara más daño, aunque es preciso mencionar que los de Héctor Tapia no hicieron mucho más en el primer tiempo tras el tempranero gol de Flores.
O’Higgins por su parte tampoco tuvo chanches claras de llegar a la igualdad en la primera mitad, sólo un remate de media distancia de Braulio Leal a los 41’ que le sacó chispas al horizontal de Justo Villar.
Ya en el complemento, O’Higgins incrementó su protagonismo en el andar del cotejo, fundamentalmente mediante la mayor posesión del balón y gracias a los ingresos de Luis Pedro Figueroa y Gastón Lezcano.
Sin embargo, al igual que durante los primeros 45 minutos de juego, el vigente monarca del fútbol chileno careció de profundidad y por lo mismo no registró serias oportunidades de gol frente a un Justo Villar que no se complicó cuando fue requerido.
En los momentos que la visita mejor jugaba el encuentro tuvo cinco minutos de detención. Desde las tribunas del estadio varios fuegos de artificio fueron encendidos y el juez Claudio Puga mandó a advertir por altoparlante la posibilidad de suspender el cotejo.
Un enojado Eduardo Berizzo por su parte instó al árbitro a tomar la determinación rápido. Seguramente “Toto” sabía que la paralización del juego le podía pasar la cuenta a sus dirigidos.
Y es que más allá de las múltiples interpretaciones que se pueden hacer, los minutos inactivos le bajaron la intensidad a un O’Higgins que al momento de retomar las acciones no consiguió emular su ritmo previo y para peor, terminó viendo como Colo Colo conseguía un segundo aire.
Dos jugadores ingresados en la segunda etapa materializaron el segundo tanto albo. Excelente jugada de Matthias Viddangossy por el costado izquierdo, quien eludió a Nicolás Vargas y envió un centro rasante para que Claudio Baeza (80’) definiera en el corazón del área chica.
Colo Colo tendría que aguantar los últimos minutos con un jugador menos, debido a la expulsión de José Pedro Fuenzalida a los 85’ por falta sobre Braulio Leal. Y pese a que Puga añadió 8 minutos de descuento a raíz de las múltiples detenciones en el juego, el elenco celeste no fue capaz a amagar la victoria colocolina.
Es más, Colo Colo cerró el partido con un gol más. Paulo Garcés derribó en el área a Jaime Valdés y Puga decretó penal que Esteban Paredes lo cambiaría por gol en el último suspiro del partido.