Pese a que el elenco rojo salió con clara decisión en el primer tiempo, ésta se fue diluyendo con el pasar de los minutos y terminó ahogado en un sinfín de centros intrascendentes que transformaron en figuras a los defensores del equipo dirigido por Martín Palermo.
De igual forma en los pasajes iniciales del compromiso el conjunto de José Luis Sierra pudo ahogar a sus rivales, pero sin tener la puntada final, necesaria si se quiere avanzar en un torneo tan importante como la Libertadores.
Ya en el periodo de complemento fueron los trasandinos quienes mostraron mayor ímpetu y de tal forma consiguieron desordenar a los defensores Jorge Ampuero y Matías Navarrete, quienes se vieron superados en distintas oportunidades.
Y en uno de los avances de Arsenal, Nicolás Aguirre puso un centro preciso para quizás el mayor jugador del compromiso, Diego Bragheri, quien con un frentazo fulminante sepultó las ilusiones del elenco chileno en el torneo internacional, cuando se jugaba el minuto 66.
El resto fue un tránsito desmesurado de los rojos hacia el campo rival, centros desmedidos, jugadas de bajo nivel técnico y baja intención ofensiva de los "hispanos", cuestión que hizo muy dura la opción de que los locales lastimasen al fondo rival.
En definitiva, la derrota provocó que Chile se quede sin representantes en Copa Libertadores. Arsenal, por su parte, jugará ante El Nacional de Paraguay, elenco que eliminó a Vélez Sarsfield.
