Más allá de las intenciones del conjunto de Luiz Felipe Scolari, el que generó la primera ocasión de peligro fue el combinado conducido por Niko Kovac. Una proyección de Ivan Perišić y un cabezazo de Ivica Olić amenazaron con enmudecer al Arena Corinthians de San Pablo.
Justamente, el croata más incisivo del encuentro envió un punzante buscapié que sorprendió a Marcelo minuto 11. La escasa reacción del lateral del Real Madrid hizo que la conquista enmudeciera a los 65.000 espectadores que colmaron el estadio.
Brasil se impuso 3-1 a una complicada Croacia en el arranque de la Copa del Mundo con dos goles de su estrella Neymar.
El partido inició con libreto de tragedia. Al minuto 11, el defensa brasileño Marcelo metió el balón en su puerta para un inesperado 1-0 a favor de los croatas.
Los europeos hacían un juego perfecto y en la tercera llegada obtenían la ventaja ante un Brasil extraviado.
Pero con la desventaja, poco a poco los brasileños se acomodaron y entonces Neymar, el mejor del juego, tomó un balón, perfiló al arco de Croacia, se abrió el espacio y fuera del área rival sacó un disparo frágil que cruzó por las piernas de un croata y, a ras del césped, se fue abriendo camino hacia el ángulo inferior izquierdo del arquero que en su máxima extensión no alcanzó el esférico.
Y el balón, siguió su curso, tocó la base del poste y se metió a la portería. Caía el empate. Era el minuto 29.
El resto del primer tiempo fue de abrumador dominio brasileño.
Para el complemento, el partido se equilibró y cuando Croacia parecía maniatar el buen juego brasileño, Fer recibió un balón de espaldas al arco. El defensa lo retiene levemente por el hombro y se deja caer. El silbante, de origen japonés, no dudó en marcar el tiro penal.
Neymar lo cobró a media altura hacia el lado derecho del arquero que logra tocar con ambas manos el esférico pero que no impide que entre a su portería. 2-1 al minuto 70.
Croacia acabó encima de la meta brasileña. Incluso, al minuto 82 le anularon un gol por falta sobre el portero y al 90 tuvo una más. Y en el contragolpe, Oscar golpeó con la punta el balón y lo metió pegado al poste derecho. Se acabó. El marcador, un injusto 3-1.
El próximo partido de Brasil será ante México el martes 17. Ese mismo día Croacia jugará contra Camerún.