
arriba pero forzó un desempate vía tie-break donde Murray tuvo nada menos que cinco set-points a favor, dos de ellos consecutivos –el primero con su saque- pero siempre apeló a su revés cruzado para terminar imponiéndose por 13 a 11.
Roger Federer se encuentra en un nivel superior al resto de quienes aspiran a destronarlo de su condición de número uno del ranking mundial. Sin la presión de Rafael Nadal al que las lesiones volvieron a marginarlo de las canchas durante las próximas cuatro semanas y desde hace ocho meses le impiden ganar un título volviéndolo un tenista sin el despliegue físico que exhibía a mediados de 2008 cuando lo venció en la final de Wimbeldon 2008 y le arrebató su liderazgo, Federer tiene el panorama despejado; disfruta de su flamante paternidad y tiene todo encaminado para que el resto de los Top-10 queden relegados a luchar por el segundo puesto del escalafón internacional.