En la pelea estelar en la función del "MGM Grand" en Las Vegas (Nevada), Pacquiao, luciendo como en sus mejores momentos, se apuntó calificaciones de 116-110, 116-110 y 116-110 sobre Bradley, en una tercera pelea entre ambos púgiles.
Pacquiao con la velocidad y poder de puños que lo han caracterizado a lo largo de su carrera, mandó a la lona a Bradley en dos ocasiones, en los episodios siete y nueve.
Pero no sólo recuperó el poder de su pegada y la agresividad de su boxeo sino que además, Pacquiao, de 37 años, también supo aguantar el castigo que recibió por parte de Bradley, especialmente en el octavo asalto cuando le colocó dos buenas combinaciones de manos.
El propio Pacquiao, que recibió una bolsa garantizada de siete millones, dijo que le había prometido a su familia que éste sería su último combate, pero todavía tienen que hablar, apuntó, dejando una ventana abierta.