El ruso Nikolay Davydenko ganó el Masters de tenis por primera vez en su carrera al derrotar al argentino Juan Martín del Potro en dos sets por 6-3 y 6-4 este domingo en la final de Londres. Davydenko gana así con 28 años el título más importante de su carrera, un año después de perder la final del 'Torneo de Maestros', disputado entonces en Shanghai, ante el serbio Novak Djokovic.
Esta victoria premia la gran regularidad al máximo nivel del ruso, que participaba por quinta vez consecutiva en la gran cita que cierra la temporada enfrentando a los mejores del año. Temido por la mayoría de los tenistas del circuito, Davydenko siempre caía justo antes del final y, en particular, ante el número uno mundial, Roger Federer.
Pero esta vez logró superar en semifinales al suizo por primera vez en trece encuentros. En la final, como de costumbre, imprimió un ritmo infernal al juego desde el fondo de la cancha gracias a la velocidad que le permite llegar pronto a las bolas, aunque también se valió de un servicio cada vez mejor (5 aces) y no dudó en subir a la red para sentenciar con acierto 11 de sus 12 subidas.
Del Potro, por su parte, sucumbió probablemente al desgaste físico tras su semifinal contra el sueco Robin Soderling que terminó la víspera pasadas las once de la noche en Londres. El joven ganador del US Open no logró concluir ninguna de sus tres bolas de break y se inclinó en menos de hora y media.
Pero esta vez logró superar en semifinales al suizo por primera vez en trece encuentros. En la final, como de costumbre, imprimió un ritmo infernal al juego desde el fondo de la cancha gracias a la velocidad que le permite llegar pronto a las bolas, aunque también se valió de un servicio cada vez mejor (5 aces) y no dudó en subir a la red para sentenciar con acierto 11 de sus 12 subidas.
Del Potro, por su parte, sucumbió probablemente al desgaste físico tras su semifinal contra el sueco Robin Soderling que terminó la víspera pasadas las once de la noche en Londres. El joven ganador del US Open no logró concluir ninguna de sus tres bolas de break y se inclinó en menos de hora y media.