
La selección brasileña se vio sorprendida por Sudáfrica, que en la fría noche de Johannesburgo hizo pasar muchos apuros a los campeones de América, pero Dani Alves, que había entrado apenas cinco minutos antes en sustitución de Andrés Santos, colocó en las redes un tiro libre cerca del área.
Aaron Mokoena había cometido falta sobre Ramires y el lateral derecho del Barcelona la cobró, lanzando el balón a la izquierda del portero Ithumeleng Khune.
Brasil, que busca su segundo título consecutivo de la Copa Confederaciones, el tercero de su historia, se enfrentará a Estados Unidos en la final, el domingo en el estadio Ellis Park de Johannesburgo, mientras que Sudáfrica dirimirá el tercer puesto frente a España, ese mismo día en Rustenburgo.